skip to main  |
      skip to sidebar
          
        
          
        
 Dice Silvia que ella, normalmente,  le compra música pirateada a Camilo. Dice que es un hombre mayor, de Guinea Ecuatorial, que va cargado con su mochila, cabizbajo, con el paso lento . Dice que  ella no comprende porqué se acerca hasta la playa días como estos,  donde solo los locos y las poetas caminan por la orilla. Dice que  regresan juntos hasta el primer bar donde toman un café y se calientan  poco a poco. Dice que cuando Camilo le habla, le duelen sus palabras, su distancia... dice que hoy le contó que no había vendido un solo disco.
Albert Camus  escribió  : “Me rebelo, luego existimos”, dice Silvia que algún día le dirá esto a Camilo y hará, seguro, como si no se lo hubiese dicho, como si él no hubiera leído ese  libro.
Tanta palabra barata,
tanto ruido,
tan poco trigo repartido.
 
 
 
 
          
      
 
  
 
 
 
  
2 comentarios:
Silvia tus palabras me dejan pensativa el alma.
Un beso
Esas pisadas sobre la arena y las olas chocando con los pies descalzos la conozco bien.
DTB
PD: Será que son muchos los que no saben repartir.
Publicar un comentario