Dice Silvia que una de las cosas que más le entristecen es ver cómo la palabra es pervertida.
Dice que a veces comprueba que la utilizan hipnotizada, la traen y la llevan, la manosean, la exhiben maquillada.
Dice Silvia que vemos impasibles este abuso, vemos cómo nos las quitan de las manos, cómo nos la arrancan, cómo nos desarman.
Lo vemos, dice Silvia, y algunos no hacemos nada para recuperarla.
3 comentarios:
Sí, nos hemos olvidado de pedir la paz y la palabra. Y el que aún lo hace es tildado de mil lindezas.
Abrazos.
Lo importante no es que haya gente que la pierda, la abandone, se deshaga de ella. Lo importante es que conoces un puñado de gente que la respeta, la conserva, la utiliza debidamente y de-vida-mente
Si, es verdad, Normita, conozco a ese puñado de gente que comentas, si no me equivoco, la mujer con la que estoy hablando ahora,el hombre que ha dejado el comentario previo, sois parte de ese puñado. Un abrazo.
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