lunes, junio 18, 2007

Dice Silvia que a veces, ella ,ve a la esperanza acercarse con sigilo, tiritando, dice que se le muere con frecuencia entre los brazos, a veces, sólo a veces, la ve caerse a pedazos, derramarse, escurrirse entre los dedos, atragantarse.
Dice también que si la observa más allá del bosque, más allá de sus sombras, de sus delirios, de sus agonías comprueba que es su costumbre, herirse las rodillas, a poquitos, a ratitos para sentirse una más entre tanto hombre, mujer y niño lastimado.
Y Silvia dice también que aunque esté mortalmente herida, la esperanza le hace señas, le indica los asombros, los sueños postergados, ella le espanta el silencio, le da de beber, le calma la sed de siglos, la sed de amor, la sed inagotable de justicia..
Es inútil,
no hay cadalso
donde ejecutarla limpiamente.


5 comentarios:

CEL dijo...

Dejo un saludo y un abrazo.

Mauricio Feller dijo...

Hermoso, muy hermoso.
A mí la esperanza nunca se me acerca con sigilo. Me traga en espirales, me aprieta el cuello, me transporta, me resucita de todas las muertes, me distingue de mi propia sombra.

Alma dijo...

La esperanza tiene alas y es muy difícil atraparla...

DTB

Unknown dijo...

yo la guardo con celo, solo ella me alimenta.

saludos

MIRIAM dijo...

Celebro tu esperanza. Es el agua que te mantiene viva y te convierte en el cántaro del que beben otros. Saludos.