jueves, julio 19, 2007

Dice Silvia que a ella le cuesta hablar. Se le quedan las palabras clavadas en la garganta como sables.
Dice que siempre fue silenciosa para sus dolores, para sus horrores, para sus amores.
Dice que cuando habla cara a cara, de tú a tú, sobre ella misma, la voz se le quiebra, frágil, delicada, se rasga en medio de la nada y apenas alcanza a explicar el lugar desde donde le nace así, traviesa, perversa, abortada.
Dice que por eso es poeta, por eso canta y por eso hoy piensa que se terminó este vivir muriendo tan callada.
Vienen las palabras
con su estela
de lágrimas golpeadas.

4 comentarios:

Alma dijo...

Silencio rebelde que atraviesa el portal del alma...

DTB

Anónimo dijo...

Yo lo que dices, lo sé, lo sé con el corazón, lo sé con la uña del dedo gordo del pie.
Es un privilegio ver la forma en que te construyes.

Unknown dijo...

Silvia, amiga de letras, no te vayas a enfadar conmigo, pero me tome una libertad sin consultarte.

Irantzu dijo...

Cómo entiendo a Silvia.