lunes, febrero 19, 2007

Dice Silvia que el otro día le han hecho daño, intencionalmente, porque sí o por si acaso.
Le han hecho daño para que le duela durante largo tiempo, para que sienta otra vez dolor a destajo, para que no olvide que las palabras, a secas, sepultan, aniquilan.
Dice Silvia que todo este daño hace que a ratos piense en la retirada, en dejarse morir, de muerte simple y tranquila.
Dice Silvia que se pueden ver los sollozos trepando ágiles por su espalda, que se le agarran a los ojos y no le dejan ver más allá del desastre.
Dice que a diario, hace recuento para saber si después de los golpes aún conserva todos sus dedos, todos sus sueños, para saber si están manchados de sangre, de insultos o de silencio.
Y dice que de momento, están limpios.
después de la ofensa
me has ordenado callar,
como si fueras dios o satán.

4 comentarios:

CEL dijo...

Enmudezco al leer, y me quedo en silencio.

Un beso

Anónimo dijo...

Porque sí o por si acaso...
.
.
.
.
.
.
Otra vez como el de los sueños...
(ya sabés), pero este incluye el final.

Sin embargo, están limpios.

Alma dijo...

Se exprime de la vida el llanto que fortalece la voluntad para
arrancar del corazón los agravios y demostrar que no se puede
silenciar el alma...

DTB

Lety Ricardez dijo...

Yo se de esto, despues de la ofensa, la orden de callar, y vino de mi madre, una herida que por más que quiero, no logro zurcir, u olvidar.

Besos Silvia